lunes, 24 de noviembre de 2014

Historia de la asociación

Nuestra asociación fue fundada en Cuenca en marzo de 2012, bajo el amparo de la Hermandad de Jesús Orando en el Huerto (de San Esteban). Los impulsores fueron un grupo de jóvenes hermanos con gran entusiasmo y dedicación.

Ya en 2011 participamos en el Torneo de fútbol que organiza cada verano la asociación cultural 'Cristo de la Salud', volviendo a jugar en el mismo en las ediciones de 2012 y 2014.


Desde 2012 publicamos durante la Cuaresma 'Getsemaní', una revista digital cuyos contenidos se centran en la Semana Santa conquense y en nuestra hermandad.

El 24 de noviembre de 2012 algunos de los miembros de esta asociación se desplazaron a Fuentelespino de Moya, pueblo natal del imaginero Luis Marco Pérez. Allí tuvimos contacto con José Benedicto, biógrafo del autor de nuestro 'paso' y de tantos otros que podemos encontrar por la geografía española. Esta visita sirvió como punto de partida para la conferencia que se realizaría el 18 de enero de 2013, con motivo del 30º aniversario del fallecimiento de Marco Pérez. En la misma pudimos contar con la opinión de José Miguel Carretero, Miguel Romero, Carlos Julián Martínez, etc. También se proyectaron imágenes inéditas de su obra, muchas de ellas realizadas por el propio escultor.


También colaboramos en marzo de 2013 con la asociación cultural 'Cristo de la Salud' en la organización de la cuarta edición de sus Jornadas de Divulgación de la Semana Santa. En mayo de ese mismo año, recibimos por parte de José Benedicto las fotografías de las figuras de Jesús y del Ángel de nuestro 'paso' cuando aún estaban en el taller de Marco Pérez. Estas fotografías se entregaron en la siguiente junta general a nuestra hermandad.


Durante la Cuaresma de 2014 pudimos realizar dos procesiones infantiles con los más pequeños de la hermandad. La primera procesión fue participando en el desfile que organizó la Junta de Cofradías, junto a otros 'pasos' infantiles y niños de la escuela nazarena. La segunda la realizamos en solitario el Domingo de Ramos, recorriendo las calles adyacentes a nuestra iglesia de San Esteban. El pequeño desfile se realizó tras el tradicional acto de hermandad de la puesta de la oliva.

martes, 18 de noviembre de 2014

Historia de la hermandad

(Texto extraído de la página Web de la hermandad.)

Durante la Semana Santa de Cuenca de 1905, tuvo lugar el origen de la procesión del Silencio, a instancias de la Venerable Hermandad del Prendimiento de Jesús, en concordia con la del Ecce-Homo de San Miguel. Promovida y costeada en su mayor parte por don Mariano Catalina y Cobo, la comitiva partió de la parroquia de San Esteban en aquella lejana tarde de abril de Miércoles Santo. No fueron solamente los pasos de “Jesús en el momento de ser besado por Judas” y el “Ecce-Homo de san Miguel”, como decía el programa oficial, los que integraron el novedoso desfile. Para dar una mayor relevancia al cortejo, se unieron los pasos de la Oración del Huerto, “… el cual antes solo salía el día de Jueves Santo desde la ermita de san Antón…”, y una hermosa talla de san Juan Evangelista, donada por don José Cobo, y que daría origen, igualmente, a la hermandad que siempre ha cerrado la procesión del Silencio, es decir, “San Juan y la Virgen en el camino de la Amargura.”

La gran aceptación y compostura demostradas por cuantos contemplaron y participaron en aquel desfile de 1905 conmovieron nuevamente a su máximo benefactor, don Mariano Catalina, el cual, en el mismo año realizó un encargo al escultor Manuel Moreno Sastre, de Madrid, para las tallas de un nuevo paso de “Jesús orando en el Huerto”, las cuales llegarían a Cuenca en 1906. El nuevo paso, compuesto por las figuras de Jesús y el ángel, estaba ejecutado artísticamente al modo “salcillano”, lleno de sencillez y plasticidad. Completaba para la Semana Santa de Cuenca la figura del ángel, mensajero del cielo, portador del cáliz y signo de la comunión con el Dios de la alianza. Juzgando las fotografías existentes, se deduce un tamaño algo menor del natural para la figura de Jesús orante, en contraposición con la talla del ángel, que era de mucha menor dimensión.


El momento evangélico elegido por el escultor se interpreta como el de la aceptación de Cristo, su conformidad para la salvación de los hombres. La expresión del rostro sosegado, mirando al cielo, y las manos unidas, descansadas, así lo atestiguan. Desde 1906 hasta 1923, este paso de la Oración del Huerto pertenece a la Venerable Hermandad del Prendimiento, cofradía que lo mantiene y saca a la calle cada Miércoles Santo abriendo la procesión del Silencio.

En 1923 es cuando se forma la hermandad, instituida por 92 cofrades y presidida por el primer hermano mayor D. Salustiano García,  bajo la advocación de una imagen del Señor, representativa de su Oración en el Huerto de Getsemaní, vulgo de las Olivas para tributarle cultos de altar y procesional en la noche de Miércoles Santo, en la procesión llamada del Silencio; habiéndose formado para el régimen y gobierno de dicha hermandad las oportunas constituciones en que se precisa dicho culto, así como el bien espiritual de los hermanos, y, para que pueda instituirse canónicamente aquélla, se elevan al obispado. Las constituciones fueron definitivamente aprobadas, tras oportuno informe del Fiscal diocesano, por el obispo y beato mártir Cruz Laplana Laguna, el 17 de Junio de 1924.

En 1936 es incorporada al paso procesional la talla de san Pedro, siendo imaginable la pretensión de la hermandad de intentar añadir las figuras de los otros apóstoles dormidos, tal y como venían representándose desde el siglo X en iconografías y esculturas diversas. En mayo de ese año, la hermandad adquiere un retablo para la colocación de las sagradas imágenes en la iglesia. En su día se dijo que era de una gran belleza y así se deduce de una antigua fotografía donde se aprecian las paredes de fondo con olivos pintados. Unos meses mas tarde, iniciada la Guerra Civil, serán destruidas todas las imágenes, andas, enseres procesionales y retablo de la parroquia de San Esteban.

Posteriormente de producirse la desaparición total de la historia de la hermandad como consecuencia de la contienda civil, ésta se reorganiza y al no contar con talla, en 1940 se incorpora al desfile del Jueves Santo, acompañando a la hermandad de Jesús amarrado a la columna, celebrando su primera junta general el día 9 de marzo de 1941. En esa junta se da cuenta de las gestiones llevadas a cabo por el secretario con la Junta de Hermandades de Semana Santa que había encargado al escultor Luis Marco Pérez la construcción de un grupo escultórico que representara la Oración en el Huerto.

La primera cuota que establece es extraordinaria de cinco pesetas para poder atender los gastos de procesión y función del año en curso. Para poder llevar el paso en la procesión de 1941, se sortea entre todos los hermanos teniendo que abonar cada uno de los elegidos la suma de cinco pesetas que son ingresadas en los fondos de la cofradía.

En 1953 se incorporan al paso las figuras de los tres apóstoles, aumentándose el número de banceros que, de veinte, pasa a ser de treinta y dos. En la década siguiente se volvería a incrementar su número a treinta y ocho. El paso por entonces se alojaba en la iglesia de San Andrés y sabemos que, en 1964, hubo de realojarse en un local de alquiler en la calle Yesares, mientras las obras que, entretanto, se acometían en el antiguo templo que le daba cobijo. En el Miércoles Santo de 1966, cuando se disponía a salir en procesión desde la iglesia de San Andrés, se produjo una grave caída del paso que ocasionó serios desperfectos en las imágenes, especialmente en la del ángel, que ese año no pudo desfilar. Unos años después, y para evitar incidentes similares, se acuerda la colocación del tercer banzo con el que todavía desfila, pasando los banceros a ser cuarenta y cuatro.



En 1978 se acomete la primera restauración del paso, que es llevada a cabo por los hermanos Pérez del Moral. En 1981, conforme a idea del hermano Miguel Jiménez Sarria, se incorporan al mismo los grandes candelabros forjados por Victoriano Carbonero Perpiñán. En 1991 llegó la instauración del Concierto de Marchas Procesionales que la Banda de Música de Cuenca viene interpretando con gran éxito desde entonces.

En 1994 se acomete la segunda restauración del paso que es encargada a la empresa restauradora, La Arqueológica C.B.

En 1997, y por lo que a uniformidad se refiere, se retorna a los cordones blancos con madroños morados, abandonándose los amarillos que durante décadas se usaron.

A partir de la década de los 2000 se inicia el apadrinamiento de niños, ampliándose la labor de caridad y ayuda social a través de distintas instituciones y organizaciones; se consolidan los conciertos de marchas procesionales y se graba en 2004 un doble CD con una completa selección de las mismas. En 2005, se instala un monumento dedicado a la Hermandad en el atrio de San Esteban realizado por Tomás Bux. También en este año, se celebró el Centenario de la Procesión del Silencio, así como, después, el magno Jubileo de San Julián.

Al año siguiente, se cristaliza el Hermanamiento con el Huerto de San Antón estableciéndose cada año un día de convivencia para fortalecer aún más los lazos de amistad. Por otro lado, se comenzó a homenajear anualmente a los hermanos de mayor antigüedad.


En 2008, se edita un audiovisual documental sobre la cofradía por medio de Producciones Play. A finales de ese año, y en junta extraordinaria en Diciembre, se aprueban constituciones.

La Banda de Música de Cuenca graba en 2010 un CD de marchas procesionales entre las que componen una de las marchas dedicadas a la Hermandad “Orando en Getsemaní” obra de Aurelio Fernández Cabrera. Ese mismo año, se realiza al final el viaje a Tierra Santa en el que por motivos bélicos no se pudo hacer con anterioridad; en la sección “Multimedia” se pueden apreciar diferentes instantáneas del viaje.

En el año 2012, se acomete una restauración al guión de la Hermandad y se pone en marcha la “Asociación Cultural Huerto de San Esteban” compuesta por jóvenes de la Hermandad.